Es el monumento más significativo del Marruecos antiguo. Está situado a 25 km al sur de Asilah en la ruta hacia Larache, en el lugar conocido como Chouahed. Se le conoce como el Cromlech de Msoura (M’zora o M’Soura).
Se trata de un anillo formado por 176 menhires, de hasta 5.4 m de alto, que rodean un túmulo elíptico de 55 m por 59 m, y elevado 6 m del suelo. Según la leyenda sería la tumba del gigante Antée, hijo de Neptuno y de la Tierra, desenterrado por un general romano que afirmó medir 60 codos (40 metros).
A falta de estudios más precisos se puede fijar la construcción del monumento entre el siglo IV y III a. C. y que este fue erigido para enterrar algún rey indígena de la Mauritania occidental. En la última década del siglo III a. C. la Mauritania occidental, en el marco de la segunda guerra púnica, aparece ya organizada bajo una monarquía, la del rey Baga que regía sobre los mauri o indígenas del África atlántica.
Este hecho significa que, en una concreción a hipótesis más verosímil, la tumba de Mezora o bien perteneció a uno de los miembros de esa dinastía, en especial al fundador de la misma (lo que encajaría muy bien con su identificación con Anteo), o es de los régulos de territorios más concretos precedentes de la monarquía unificada. Debe tenerse en cuenta la espectacularidad del monumento que exige una dedicación a su construcción de mucha gente durante bastante tiempo.
Alrededor de esta colina artificial o túmulo existen toda una serie de menhires o monolitos de piedra tallada, que son en su parte visible de medio metro de altura, aunque hay algunos más elevados, como el denominado por los lugareños El Uted (“el pico”), de casi 6 m de altura, y situado cerca de otro de unos 4 m. Por último, la tierra del túmulo se retiene por un muro de contención formado por piedras de arenisca cortadas en bloques rectangulares, de la misma cantera que los monolitos y de un enlosado con paramento de sillares.
Dada la semejanza que existe con otros monumentos del Reino Unido da la sensación de que fue erigido por el mismo pueblo y en la misma época .
El monumento de M´soura forma parte de un conjunto de otras manifestaciones megalíticas presentes en la zona en la que destaca por estar situado en el centro de un perímetro delimitado por monolitos dispersos, y por ser la construcción mas emblemática. En el museo de Tetuán se puede observar una maqueta en la que se aprecia la distribución del recinto. En los alrededores existen varios afloramientos de silex de los que se extraía para fabricar, a tenor de lo hallado, gran variedad de utensilios de sílex: raederas, puntas, hachas. Etc (Museo Arqueológico de Tetuán).
En las inmediaciones del monumento se hallaba un alineamiento de menhires, algunos de los cuales aparecen dispersos en las cercanías.
Entre 1932 y 1936, el Asesor Técnico de la Junta de Monumentos, Cesar Luis de Moltaván, realizó una profunda y desafortunada actuación, con una excavación muy agresiva en el túmulo abriendo una gran zanja, en busca de un corredor interior que terminara en un dolmen central que no encontró. El paso de los años y la posterior utilización por los lugareños de los materiales que lo conforman, han propiciado que en la actualidad se encuentre muy deteriorado.
Nada o muy poco se escribió sobre los hallazgos encontrados por lo que hoy es muy aventurado precisar hasta donde pudo llegar la manipulación o transformación del monumento y lo allí encontrado. Se afirma que se halló una tumba formada por lajas de piedra (cista) que se encuentran desperdigadas por la zona.
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